Ikki, hace venir de la Isla de la Reina Muerte a los cuatro Caballeros negros más poderosos: Pegaso Negro, Cisne Negro, Dragón Negro y Andrómeda Negro, y les entrega en custodia cada uno de los fragmentos de la armadura de Oro que aun posee, mientras que él conserva el casco. El objetivo no es solo proteger la armadura, sino también recuperar los fragmentos que están en poder de Seiya y los demás.