Harold Lloyd da vida a Ezekiel, el hijo de un misionero que ha vivido toda su vida en China, rodeado de buenos cuidados, e imbuido de la práctica religiosa y la sabiduría oriental. Pero cuando marcha a Estados Unidos, en busca de una buena chica con la que casarse, se encuentra una ciudad donde reinan la corrupción y las intrigas. Cuando llega, están a punto de celebrarse las elecciones a la alcaldía, perfectamente amañadas para que gane el de siempre. Pero, cuando el candidato, un hombre de paja, muere, creen que el ingenuo Ezekiel es el sustituto perfecto.